un montón de
árboles me cubren la vista
allá afuera
nosotros
ocupamos un lugar
entre la gente
si cierro las
cortinas y me quedo
igualmente somos
muchos
los que
sostenemos la escena
apagando la
respiración se escuchan
los animales
salvajes
que golpean el
techo de la casa
vigilando mis
movimientos más sutiles
e imitando su ritmo
crujen las hojas debajo
de sus pies
en la oscuridad
pareciera que es más fácil
asustarse que
pensar
pero a mí me
tranquiliza perder el control
que escondan mi
cuerpo con llave
hacer de cuenta que
la casa está vacía
que al fin se
fueron
que si los
vidrios se rompen
el paisaje de
fondo se dispersa en mil pedazos
pero la
estructura
me sobrevive